La lectura de esta mañana en el CEIP Los Molinos, fantástica. Un centro bien organizado, una buena preparación y un ambiente magnífico. Participó con nosotros Sofía Rivera, alumna del centro, que estuvo genial. Eso sí, el cocinero anduvo todo el tiempo con el gorrro aplastado.
El siguiente al Día del Libro, hay que continuar fomentando el hábito de leer porque, como dijo alguien, la lectura como el amor, es la piedra ideal para afinar el alma.
Mañana, de nuevo Diana, yo y alguien más, volvemos a leer un cuento al alumnado del CEIP José Nogales. Ella está muy ilusionada, porque se trata de su colegio. Yo, quince veces más que ella, porque siento disfrutar a los niños y, especialmente, a ella.