Dice el estribillo de unas sevillanas «Y es que ha venío / otra vez la primavera / la primavera ha venío / y la gente rociera / otra vez se va al Rocío». Y así es, llegó la hora: a preparar la carreta, el charré, el caballo o un par de cómodos zapatos (que bien pueden ser unos botos de Valverde) y pa´l Rocío. Fe, convivencia, camino, juerga, traje de lunares, cante… Y yo, aprovechando el momento, comparto unas letrillas de sevillanas tradicionales dedicadas a la Virgen del Rocío y su fiesta.
[11]
LA VIRGEN DEL ROCÍO,
COMO ES TAN ALTA,
SE LE VEN POR ABAJO
LAS “NAGUAS” BLANCAS.
Y POR ARRIBA,
SE LE VEN LOS COLLARES
DE PERLA FINA.
[12]
LA VIRGEN DEL ROCÍO
LLEVA EN EL HOMBRO,
UNA SALAMANQUESA
DE PLATA Y ORO.
[13]
ESTE AÑO AL ROCÍO,
VAN MUCHOS CALVOS;
A PEDIRLE A LA VIRGEN
EL PELO LARGO.
[14]
LA CARRETA Y LOS BUEYES
SON DE MI PADRE;
Y EL CARRETERO ES MÍO,
DIOS ME LO GUARDE.
[15]
NO SE QUE TIENE EL ROCÍO
CON SU RUMBO Y SU ALEGRÍA,
QUE NO PUEDE COMPARARSE
CON NINGUNA ROMERÍA.
EL QUE SE ASOMA
SE ECLIPSA CON TUS OJOS,
BLANCA PALOMA.
Y, para terminar, una hermosa referencia al camino:
[16]
CAMINO DEL ROCÍO
ESTÁN ARANDO;
DE ROSAS Y CLAVELES
LO ESTÁN SEMBRANDO.