DIARIO DE UN CONFINADO (2)

Día 2. 15/03/20. Domingo.

Como era previsible, las cifras no mejoran: 6.405 diagnosticados; 198 muertos; 517 dados de alta. Este último dato parece alentador, pero los diagnosticados han aumentado un 23% y han muerto 66 personas más. Además, en los personal, el bicho se acerca: ayer se diagnosticó el primer caso en Valverde del Camino. (Estos datos son del día 15 por la mañana, en el momento que publique esta página del diario, por la tarde, serán muchos más).

Hay pocas situaciones con capacidad para retratar una sociedad en su conjunto. Una crisis de salud como la que vivimos, es una de ellas. Todo es evaluable: el Estado, los políticos -las medidas que toman y sus actitudes-, los recursos, la situación real de nuestra sanidad, la sociedad, la familia, cada persona… Al final –cuando llegue, que siempre hay un final-, todos tendremos una percepción de cómo se comportó cada organismo, cada unidad y cada persona en cada momento. Pero me temo que de aquí a entonces nos quedan muchas cosas por escuchar, ver y sentir.

Ayer el gobierno decretó el estado de alarma. Artículo 116 de la Constitución de 1978. ¿Lo han leído o con tantos memes no han tenido tiempo? Conviene una lectura, saber de qué hablamos. Nos ayudará a conformar una visión del procedimiento, ámbito, actuaciones, desarrollo y consecuencias.

Forges, siempre sentenciando.

Entre los whtapps no dejan de llegar recursos para ir sobrellevando los días: listas de museos a visitar por internet, lecturas, juegos… todo interesante, pero en casa, aunque en estos días -continúa la climatología que nos viene acompañando en las últimas semanas, propia de primavera avanzada-, el tiempo invita a salir, a pasear, a dejar de las cuatro paredes.

Nosotros, las personas adultas curtidas por los años, sabremos adaptarnos y sobreponernos. Pero pienso en mis alumnos que, con seguridad, lo pasarán mal: por lo general no son capaces de estar 30 minutos sin moverse del asiento, ni dos horas sin salir de la clase. Algunos sé que fuman y sus padres no lo saben ¿qué harán? Algunos padres no están acostumbrados a estar 24 horas con sus hijos. En muchos casos, no se conocen bien. Se darán mil situaciones que ustedes ya saben. El saco de los conflictos puede acabar lleno. Y rebosar.

Anoche, desde los balcones y ventanas, hubo un merecidísimo homenaje a todos los sanitarios que se están dejando la piel por nosotros. Por muchas palabras que escriba, nunca el reconocimiento hacia ellos será suficiente. Cuando pasen cuatro días, los padres también reconocerán o ratificarán el reconocimiento a los docentes.

Hoy no he salido de casa para nada. Hay personas que saben estar solas, que conviven e incluso gozan de la soledad. Otras son incapaces, necesitan estar rodeadas de gente. Creo que tenemos que ir interiorizando la situación y adoptar recursos para combatir los momentos difíciles. Esto va a ser largo y debemos prepararnos. Ahora estamos empezando. Ánimo.

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