La gente de fuera quizá no sea consciente de la trascendencia que tiene para un pueblo como Encinasola que el ENCUENTRO sobre VALORIZACIÓN Y DINAMIZACIÓN DEL PATRIMONIO CULTURAL TRANSFRONTERIZO se realice aquí, en tierras marochas.
Porque todo eso que llaman la España vaciada, aquí toma cuerpo en forma de LA RAYA VACIADA y cualquier estímulo se valora y agradece.
Serán dos jornadas: el 8 y 9 de octubre. La responsable del proyecto, Elodia Hernández León, nos presenta un atractivo programa (lo puedes encontrar detallado al final) con charlas, coloquios y ponencias que pondrán de manifiesto la realidad de los pueblos que viven pegados a la frontera.
Participaré con la charla «COPLAS QUE NO DETUVO LA FRONTERA». Ya sabes, esas coplillas que llegaron de Encinasola y algunos pueblos del suroeste extremeño a Barrancos y allí cantan con un castellano aportuguesado. Vestigios de un sinfín de historias compartidas.
Siempre digo que nos dora y alumbra un mismo sol, nos moja la misma lluvia, compartimos flora y fauna, el suelo que divide los mojones fronterizos tiene las mismas características, fluyen arroyos y riberas que, antes o después, recorren los campos de unos y otros, y, cuando buscas en el pasado, al final, siempre encuentras raíces comunes. Nuestros antepasados se fundieron entre sí. Nos une la sangre.
Y así, entre las muchas cosas que compartimos están esas coplillas que -como golondrinas que van de un lado a otro- no conocen el sentido de los puntos y rayas que trazaron los estadistas. Pero la frontera, en vez de separarnos, forjó entre la gente de Barrancos y Encinasola lazos indestructibles.
Cantan los barranqueños:
Barrancos és minha terra,
bonita vila arraiana;
tu cantas à espanhola,
e também alentejana.
Por esas coplas que cantan «a la española», discurrirá la ponencia. Os esperamos.
La música de hoy CANDEA FADO, de ACETRE. Como te digo siempre, relájate y déjate llevar por la música. Vuela.
PROGRAMA: