El próximo libro en el que estoy trabajando, ya muy avanzado, es una recopilación de cuentos infantiles de tradición oral, que aún no estén publicados. Y, créeme, rebuscando en los confines de la memoria de la gente mayor, los hay.
Por San Andrés del año pasado me invitaron a leer algunos de estos cuentos en Encinasola. Fue una gozada porque, además de la magia de los cuentos, la narración la realizó mi nieta Diana, que leyó el «Cocinero y el fuego«. Una experiencia inenarrable oír como leía públicamente uno de los cuentos que tantas veces le he contado a ella y a su hermana Alba.
Hace unas días me invitaron del CEIP los Molinos de Valverde del Camino para que repitiera la experiencia con motivo del Día del Libro. Y allí estaremos mañana Diana y yo. Será otro momento mágico y no dudo que al alumnado del centro le encantará.
Mi agradecimiento al CEIP Los Molinos por permitirme tan buenos momentos.