207_240530 CUADERNO DE NOTAS. Día perfecto.

31 de mayo, 12:45 h. Salgo de casa a unas gestiones. Corre una ligera brisa. Caliente. El sol está arriba y las sombras de las casas se han encogido. Cincuenta metros y ya se nota un calor sofocante. Los cuerpos necesitan atemperarse, pienso, les cuesta soportar estos cambios tan bruscos. Al menos el mío.

Ya conoces ese de “hasta el cuarenta de mayo, no te quites el sayo”. ¡Jajaja! Este pertenecerá al refranero norteño o a otros tiempos porque, por estas tierras del sur y ahora, estamos ya como un bombón al sol de agosto. 

Otro decía que “ni frío hasta Navidad, ni calor hasta San Juan”. Si asociamos el calor al verano, lo de San Juan tiene sentido, que ya sabes que “en junio, el día veintiuno, es largo como ninguno” y San Juan es el 24.

Antes de escribir he mirado el santoral de junio. Antes de San Juan, el 13, llegará San Antonio. Leo que ese mismo día lo comparte con Santa Felícula. Y se me ocurre contártelo por si conoces a alguna, recordarte que no se te olvide felicitarla.

Releo lo escrito. Compruebo que el calor me ha afectado seriamente. 

A pesar del calor, éste, puede ser un día perfecto.